Los camareros tenían mucha lentitud, unca había visto nada igual .Un señor bajo que ponía bebida, nunca nos dio ni una sonrisa... el penúltimo día nos puso una botella con sangre, le pregunté que era eso chorreando por la botella y dijo que era que se había cortado que no pasaba nada por que la sangre era suya. Le pasó una bayeta y dijo que me la llevara. Yo no daba crédito. Para mí es uno de los peores hoteles donde he estado por culpa de los trabajadores, quitando Julia de recepción, David de cocina, Melecio, Fiona y Andrea de bar. Y sobre todo Manuel del comedor, que nos ofreció incluso hacerle un arroz sobre la marcha y preocupándose por cómo estaba a una persona que vino con nosotros que estaba malo. Quitando estos que se portaron muy bien con nosotros. El resto de los empleados unos antipáticos y bordes, parece como que te estaban haciendo un favor cada vez que te atendían en algo. El que más destacó para peor fue José León del comedor, desde el primer día fuimos a pedir una botella de agua y de muy malas maneras dijo que no nos apoyáramos en la barra que si no veíamos que había copas, mientras que en las barras es común apoyarse y hay maneras de decirlo. Éramos 4 personas y las mesas estaban ocupadas, fuimos a preguntar a un camarero si podíamos coger una de 6 y nos dijo que sí. Pero vino José León a decirnos de malas maneras también nos dijo que no que tenía que ser una de 4, pero no es por lo que dijo sino como. Para rematar, todos teníamos todo incluido y fuimos a coger una botella de vino, estaba otro camarero en ese momento poniéndolo, nos preguntó que si queríamos copas o una botella (dijimos botella por que sabíamos que se iba a beber). Y rápido llegó el, se lo quitó de las manos de muy malas maneras llamando la atención de la gente, y dijo que nada de botellas sino por copas. Al hablar con Manuel, dijo que por su puesto que nos entraba la botella ya que para eso estábamos con el todo incluido. Luego José León quiso echarle la culpa al anterior camarero. Parecía que nos cogió manía, cada vez que entrabamos al comedor sobre todo antes de que Manuel le riñera, ni siquiera nos miraba a la cara, a los demás les saludaba. Pero a los últimos días sí, ya que le pegarían un toque de atención. También hay que decir que no se puede pagar tanto dinero por un todo incluido y que luego se tengan que pagar los botellines de agua, que en el best roquetas entraban gratis. Mientras que las botellas de whisky son completamente gratis, no tiene sentido.
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