Como siempre, ha sido un placer mi estancia en este hotel. Elegí la habitación que tiene acceso al Grand Lounge, donde puedes tomar bebidas, desayuno y cena ligero.
Esta vez la novedad fue que abrieron un área nueva con alberca y bar. Les quedó increible.
Como parte del status VIP que me dieron a través de *******, recibí una botella de cortesía, así como el desayuno continental en su restaurante. Es más que un desayuno continental, es superior.
El servicio y atención de primera. Lejos de bajar sus estándares, este hotel los supera en cada estancia.
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