Para empezar, al llegar me han dejado permanecer en las instalaciones del hotel hasta que a las 15:00 me llegue un mensaje al correo electrónico proporcionado en el cual dirían que la habitación estaba lista, no me llegó ningún correo y tampoco estaba lista a la hora dicha, he tenido que esperar hasta las 15:30 y encima al llegar no estaba preparado el sofá cama en el que se iba a quedar mi hijo, tuve que hablar con el personal de limpieza para que me la hiciera y encima me dice que eso es problema de recepción… lo dejo pasar. Después me encuentro con que la habitación tiene hormigas y que las latas que me han dejado en el mini-bar estaban llenas de arena, por otro lado solo tienen un socorrista para 5 piscinas al cual he visto 2 veces en todo el fin de semana cosa que es normal porque no se puede dividir. También el horario del miniclub es horrible, solo tienen a los niños 1h y 30 que no da tiempo para hacer nada y encima si en ese tiempo quieres ir a la piscina sinfín que está situada en el bar piscina sunset, es imposible a no ser que vayas a las 7am a reservar hamacas, la piscina estaba vacía y las hamacas también pero todas reservadas con toallas, debería de prohibirse o tener a alguien que revise esta situación. Otra cosa para destacar es que para reservar en los diferentes restaurantes temáticos tienes que hacerlo a través de su App, queríamos reservar en el restaurante Atlantico para el grill, el día antes no pudimos reservar, el mismo día ya decía que estaba completo, vamos a preguntar a dicho restaurante a ver si nos pueden buscar alguna solución y nos dicen que no y nos mandan a recepción, en recepción nos dicen que no pueden hacer nada y que vayamos al restaurante sobre las 20:45 a ver si alguien ha cancelado y nos encontramos con que no ha cancelado nadie, nos tratan con indiferencia con respecto a los extranjeros y encima no nos buscan ninguna otra opción mas que vayamos a recepción y nos quejemos al metre que se llama Costa (este señor es un encanto, todo hay que decirlo). En recepción, toman nota de nuestras quejas y nos dicen que para compensar lo sucedido no permiten quedarnos el día del check out hasta las 18:00 sin abonar nada, cuando vamos a la habitación, nos han desactivado las tarjetas y el personal de la limpieza nos dice que hay normas y que no se puede hacer nada, CON TODAS NUESTRAS COSAS DENTRO, dice que vayamos a recepción una vez mas, se le dice que si ella no puede llamar para no tener que ir desde la habitación hasta allí y nos dice que no. Total que tuvimos que subir nuevamente a presentar una queja. La mini-disco se hace sobre las 17:30 aproximadamente en el horario de piscina, solo está pensado para los huéspedes ingleses o de otros países, no se tiene en cuenta que también hay niños disfrutando de la piscina en ese horario, deberían de ponerlo en una hora que se adapte un poco a todos y lo mismo pasa con el show de la noche que se pone durante el horario de la cena, lo único que vale la pena es la riu party q
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