Antes de aterrizar en mi Mallorca (Spain) del alma, tierra que amo con todo mi ser, días de relax en Mikonos, tierra griega de mis antepasados por línea paterna. Partiendo de la base de mi absoluta sinceridad, y que por tanto para mí pese a todos los hoteles de lujo en los que he disfrutado siempre me quedaré con el Ritz Paris Hotel como mi hotel preferido porque es nuestro hogar en Paris, y que mi paraíso para descansar es Bora Bora, y dentro de esa localización el St Regis Bora Bora Resort del cual hice una reseña en esta página de Tripadvisor para ayudar a otros viajeros (https://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g311415-d597947-r793134108-The_St_Regis_Bora_Bora_Resort-Bora_Bora_Society_Islands.html) no pudo dejar de reconocer que para mí Mikonos es muy especial por diversos motivos personales, y este hotel es la joya de Mikonos. El mejor hotel para descansar en Mikonos es, sin lugar a dudas, el BILL & COO Suites & Lounges, y dentro de él su BILL & COO COAST SUITE WITH PRIVATE OUTDOOR POOL, situada en la planta baja, con una amplia terraza con piscina, donde como huéspedes pudimos deleitarnos al máximo siendo súper mimados durante nuestra estancia, rodeados de comodidades sin concesiones, absolutamente todo lo que quisimos lo tuvimos con lujos de clase mundial, siendo difícil decidir qué se parece más al paraíso, si la Suite nuestra o la playa Prístina, aunque obviamente esa playa es absolutamente hermosa… La belleza de la isla de Mikonos se recoge perfectamente en este hotel, lujoso y resplandeciente, y sobretodo en nuestra hermosa Suite (las restantes suites también lo son pero mi preferida es esa), idílicamente encaramada con vistas a mi amado Egeo, luminosa, y con una piscina privada con vistas simplemente impresionantes. Por la noche me bañaba con mi acompañante en mi piscina privada divisando el Egeo y me maravillaba…. El secreto es la sorprendente vista al mar, y el acceso al club de playa, lo cual nos proporcionaba anonimato y una experiencia de vacaciones de primera calidad incomparable en esta mágica y seductora isla de Mikonos. Pero a mí como Suite acostumbrada a la Impériale del Ritz Paris superior a los doscientos metros pues se me quedaba falta de espacio, dado que pese a ser la Suite más espectacular sólo tiene cuarenta y cinco metros cuadrados. Eso para mí como Suite es pequeño. Lo que sucede es que claro se complementa con las vistas asombrosas, con el servicio de Jet Privado lo cual facilitó nuestra llegada a la isla y al propio hotel, y con otros lujos que no me atrevo ni a plasmar por escrito. Pero a mí se me quedó pequeña la Suite, menos mal que la piscina privada de la Suite obviamente lo compensaba al darle una amplitud considerablemente mayor. En el hotel pudimos disfrutar de varias opciones de restauración, en concreto del Gastronomy Project que es un multi-galardonado restaurante, del Beefbar Mykonos, de la Taverna que es una mezcla de la tradición gastronómica mediterránea con especialidades inspiradas en el ga
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