Conocimos el hotel Galini en la temporada 2013,desde entonces volvimos otras 6 veces,incluyendo esta última en junio de 2023.Si en aquel primer y lejano verano,este pequeño hotel nos enamoro por la atención de la familia Latinas, por la calidez de su ambiente, por el excelente desayuno y por la muy buena ubicación frente al mar,no dejamos de admirar su constante evolución en calidad cada año que pasa,desde la reforma de todas las habitaciones,cada una diferente en la decoracion,bellísimas todas,como también lo son el pequeño lobby,la sala del desayuno y la terraza con vista al mar y a la pequeña capilla,donde es un placer desayunar o tomar una copa por la noche.Todo está cuidado con extremo detalle:puertas,pisos,iluminación, colores,muebles.Ademas,el buen descanso esta asegurado,camas confortables con buenos colchones en habitaciones silenciosas y muchas con balcones o con patios.Detalles como la botella de agua gratuita en la habitación.Otro tema en el que se supera todas las temporadas es el delicioso desayuno artesanal,cada vez con más calidad y variedad,tanto en lo salado como en lo dulce.Las mermeladas caseras son excelentes,tambien los budines y bizcochos(el de zanahoria es inolvidable) y los strudell salados y dulces,el queso en aceite de oliva,el chutney de pimiento rojo,las dulces cerezas y el yogur.Novedades como los dulces orientales y los wrap.Todo un festín matinal.La relación calidad precio es excelente. Y por último la cereza del postre,la familia que nos recibe:George orgulloso por la calidad de su desayuno,la calidez de su esposa Despina,mujer dulce,amable,simpática y Manolis,con sus buenos consejos respecto a que ver en Naxos o a donde ir a comer.Otro plus,además de inglés y lógicamente griego,también hablan italiano y francés.La "mamma"Sofia ya no trabaja,pero casi todos los días hace una visita matinal, para no extrañarla. Espero que tengamos buena salud para poder volver el proximo verano a la maravillosa isla de Naxos y al Galini y reencontrar a sus lindos anfitriones.Parakalo poli.
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