Gran opción de hospedaje. Está súper cerca de todos los sitios importantes, tanto que mi pareja y yo no tuvimos que tomar taxi para ningún lado.
Al llegar nos dijeron que si pagábamos en efectivo nos iban a dar el desayuno gratis. Así lo hicimos y fue muy bueno! En un lindo restaurante en el patio del hotel puedes elegir chilaquiles, enmoladas, enfrijoladas, enchiladas y huevos al gusto. Todos incluyen pan con mermelada y mantequilla, jugo, y hasta chocolate oaxaqueño.
Recamaras amplias así como el baño, todo muy rústico pero lindo. Todo el personal del hotel muy a amable.
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