坎弗朗克站皇家世外桃源酒店(Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel)

Nice place, nothing to complain

De todo lo explicado en otras opiniones, en la que destacan la amabilidad de todo el personal del hotel, el cuidado de los detalles y el viaje en el tiempo. Me centraré en: - María, la guía turística que te hace la visita guiada. Gran profesional y haciendo de la actividad un rato lúdico pero explicando perfectamente la historia de la estación (que tiene su miga) - De la parte del hotel, un punto a mejorar es la lentitud en traer los cafés del desayuno. Hay una máquina de cafés que no está a diario en el salón de desayuno. Dejadla para que la gente pueda hacérselos al momento y cuando deseen. - Muy buena calidad de la comida del restaurante El internacional.

On en a plein les yeux ! La belle gare rénovée façon art deco , bien incluse dans le site de Canfranc près du fleuve. Un grand hall magnifique, des bars décorés et confortables, une salle de restaurant grande et belle. Partout l’idée de gare, de train, dans les luminaires, dans les couloirs, dans les indications. Les chambres sont spacieuses, les lits interminables…. La salle de bain de luxe ! Une expérience à vivre, dans le cadre du Somport.

Mi reciente estancia en la estación de tren de Canfranc fue una gran decepción, especialmente considerando que se trata de un hotel de 5 estrellas gran lujo. Reservé la suite 151 con grandes expectativas basadas en las fotos publicadas, pero la realidad distaba mucho de lo prometido. La suite era pequeña , similar a una habitación normal, (en cuanto a metros no hay diferencia) y carecía de iluminación adecuada. A pesar de ser un hotel recién reformado, los materiales utilizados parecían baratos. Las fundas de las almohadas estaban sucias y las etiquetas de los cojines eran visibles, algo que nunca había experimentado en un establecimiento de esta categoría. Los bares y cafeterías del hotel están decorados con buen gusto, pero no ofrecen nada fuera de lo común. En general, mi estancia fue DECEPCIONANTE. No recomendaría este hotel a nadie que busque una experiencia de lujo . He estado en varios hoteles 5* gran lujo y nunca había experimentado algo como en esta estación . No sé quién le dio las 5 estrellas , pero según mi opinión , es un hotel normal , y las habitaciones son muy básicas . Las vistas de la habitación son indescriptibles , es igual que estar en una fábrica abandonada . En la suite nos tocó una vista , que según mi opinión era mejor tener las cortinas cerradas para no deprimirte No repetiría en absoluto esta experiencia.

Que una vieja estación de tren abandonada, se convierta en un hotel, es una maravilla. Pero tras alojarme no me he quedado satisfecha. La recepcionista que nos atendió al llegar al igual que el chico que nos acompañó a la habitación, encantadores, pero a la habitación, le faltan años luz para ser un 5. Muy pequeña, las vistas pésimas, el baño no tenía ningún colgador para albornoz o toallas, la luz de la derecha del espejo del baño estaba fundida, las ventanas estaban muy sucias, las fundas de las almohadas no cubrian totalmente los cojines y dejaban al aire las etiquetas de los mismos. No sé, iba cin mucha ilusión y me llevé una decepción. Recomiendo encarecidamente no coger una suite, a menos que se use el sofá cama para una segunda o tercera persona, porque es igual de pequeña que las otras. De positivo, puedo decir que el room service funciona bien y el desayuno es muy variado.

La edificación la reconstrucción y la adaptación a hotel es una obra que sin duda merece ser vista y disfrutar de los detalles y la exquisitez del hotel con detalles excelentes dentro de un edificio y entorno magnífico El personal del hotel acaban de redondear la experiencia hasta el último eslabón llamado Sergio Si puedes no debes perderte la experiencia

Un voyage dans le temps et l'histoire. Magnifique chambre tout confort avec une literie de top qualité. Petit déjeuner parfait. Services impeccables. Seul bémols, aucun espace exterieur pour se poser (un petit jardin pour les gens qui sejournet à l'hôtel ou une terrasse seraient bienvenus). Et également la piscine, payante, aresrver pour 50min et avec des horaires très restreints pour les personnes sans enfants.

Hemos disfrutado de una experiencia maravillosa de tres noches en este Hotel Junto a unos amigos. Espectacular la rehabilitación, lujosa Pero sin perder el encanto de la antigua Estación . Sientes que estás dentro de una estación de tren real muy lujosa . Disfrutamos de una de sus suites en la primera planta , Con todas las comodidades y los detalles. La luz natural era increíble Y el paisaje desde las ventanas. Muchas rutas y senderos para hacer directamente desde el Hotel. Sin duda, volvería a repetir

Es la tercera vez que vamos, en pareja. Es una experiencia inmersiva en el tiempo de la historia que ha tenido. Recomendable la visita guiada. El hotel es una joya en si mismo. La atención y servicios son excelentes, el confort de la habitación merece la pena ( detalles y ambiente), la limpieza perfecta. El restaurante merece la pena poblarlo, aunque sube de precio. No dejar de ir a la Biblioteca a tomar cocteles, muy buenos y profesionalidad de Valentina. El wellnwess esta muy bien en tratamientos, atención y personal muy profesional. La piscina no es de lo mejor, se echa de menos un jacuzzi. Gracias a ambas masajistas por su trabajo, no recuerdo el nombre. Gracias a Fernando, el Botones por su atención e indicaciones. Simplemente el entorno es espectacular y el descanso es real. Lugar con encanto especial. Minino para conocer los pueblos y la zona 2/3 noches.