El hotel es un sueño, al llegar el recibimiento, es encantador, la zona de recepción, con el columpio, las piedras, te sientes muy a gusto. Cuando paseas por el recinto para llegar hasta tu bungalow disfrutas de toda esa vegetación, flores y arboles todo etiquetado para saber que es y de donde viene, no falta un detalle. La comida en el comedor, es fantástica. El personal encantador. Te encuentras muy a gusto. Y el bungalow, el sueño mas grande, con piscina privad, un jardín con flores maravillosas, qeu puedes contemplar desde la hamaca. La habitación y el baño, muy bonito y el recibidor con todos los detalles. Una pena no tener mas días para quedarnos disfrutar de las tirolinas, y de toda la vegetacion, los arboles con sus troncos gigantes. Un placer pasear por alli. Cuando nos fuimos todo el personal salió a despedirnos, un detalle precioso, y nos quedamos con sus amables sonrisas. Espero que volvamos y con mas tiempo, las visitas que se pueden hacer desde alli son fantásticas, el pueblo al lado, los masajes, el espectáculo deportivo. y por supuesto el parque nacional de Periyard., que es una delicia. Todo suma, para estar alli una se***ita mínimo Creo que me quedare con el hotel mas agradable de todo el tour, y todos fueron fantásticos. Su personal lo hace aun mas especial
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