加維納海洋酒店(Hotel Gavina Costa Mar)

La habitación que daba hacia la calle era tremendamente ruidosa por las noches ya que los ventanales no eran de termopanel, además el ventanal de mi habitación no cerraba (tuvieron que arreglarlo). En la piscina faltan sombrillas, el sol es insoportable durante la tarde, el pasto sintético horrible estéticamente, lo mismo los bordes de la piscina con unas púas que le quitan a la vista la relajación que ese entorno merece, definitivamente deben mejorar el espacio de la piscina.

Lamentable la experiencia , Sunset a partir de las 19:00 y hasta las 24:00 imposible descansar ruidos molestos que traspasan el sonido ambiental , piscina ocupada y se pierde el sentido del hotel descansar imposible , se hizo presente en recepción y solo se recibe la molestia de los pasajeros

He ido en múltiples ocasiones a este hotel porque me encanta la vista maravillosa y escuchar el sonido del mar en la noche. Usualmente llegamos muy temprano por los horarios de los vuelos y nos reciben el equipaje y lo guardan hasta poder hacer el check in. El desayuno del día de llegada no está incluído, pero es buffet por un valor creo de 14.000 por persona, pero es espectacular, hay mucha variedad de alimentos y con una vista espectacular. Me gusta la habitación que está justo en una esquina y la última vez que fui no nos hicieron problema para cambiar a mi habitación favorita (los amé) Los domingos hay almuerzo buffet también (con costo adicional) En general todo el personal es un 7, siempre han sido super atentos, solucionan cualquier duda o solicitud con celeridad y siempre nos han atendido excelente. Sólo tengo buenos comentarios para el staff de recepción y del restaurante (para todos, no podría dejar fuera a nadie porque mi experiencia cada vez que he ido ha sido cada vez mejor)

Las vistas al Pacífico espectaculares recomiendo las que dan a la costa ; servicio excelente; comida excelente; desayuno excelente. El paisaje que se ve desde el restaurante bellísimo ; cerca de la Zofri ; en una palabra me encantó; volvemos.

Excelente ubicación y vista, pero…. 1. mucho ruidos de habitaciones contiguas y las fiestas q organizan en la pileta hasta las 12 de la noche. 2. Toallas viejas , percudidas. 3. Instalaciones , especialmente el baño obsoletas y mañ conservadas , por ej el mini placard, duchas, aberturas. 4. desayuno regular , pocas opciones . 5. En general buena atención del personal , salvo un par de personas , una en recepción y otra en restaurant .

Llegamos al hotel Gavina con altas expectativas el día 29 de Noviembre de 2022. Las mismas disminuyeron bastante al momento de entrar en contacto con el personal de Front Desk. Nuestra reserva no estaba cargada y tardaron 40 minutos en entregarnos la habitación, siendo las únicas huéspedes esperando. Viendo esto decidimos ir a cenar para luego volver a hacer el check in. El servicio del restaurant es destacable, buenos sabores y variedad de vinos. Cuando nos entregaron la habitación inmediatamente nos fuimos a dormir y al despertar, vemos que la habitación estaba sucia. Amenities usadas, vidrios marcados y suelo con tierra. Al momento de expresar esto a la recepcionista, su trato fue completamente poco empático y amable. Siempre con mala cara y pocas ganas. Le explicamos lo sucedido y respuesta fue "En el fondo, que es lo que necesitan?". Lo que necesitábamos era DORMIR EN UNA HABITACIÓN LIMPIA. Como si esto fuera poco, nos duplicaron un cargo en la tarjeta de crédito. No volveremos jamás.

My one-night stay at Gavina Sens was great, but my whole experience was drastically elevated thanks to the incredible service of Antonio at reception. Not only does he speak fluent English, he is the kindest individual I have met anywhere in Iquique, and he goes above and beyond to ensure stays are the best here. He and his team set me up with a wonderful ocean-view room for my stay, and the views were outstanding. The price is high, but the cost is worth it. Moreover, when I encountered difficulties with electric wheelchair accessibility and taking a long-distance bus, I briefly returned to Gavina Sens just to seek out Antonio’s assistance (as he really was the only English speaker who could understand and solve my complex needs). He showed excellent compassion and effort in coordinating with regional bus companies to ensure my electric wheelchair could have time to be loaded onto the bus, and sure enough, I successfully left the city for a trip to Arica later in the day. Without his help, I would’ve surely been stuck in Iquique for a long time more. All in all, I recommend this property for a classy Iquique night’s sleep!

El hotel cumple para un viaje y estadía corta de negocios. La ubicación y vista al mar es lo mejor que tiene, pero la habitación se nota descuidada, vieja. Se nota que remodelaron las habitaciones pero no hubo atención en los detalles, algunos no menores (la puerta del baño no cerraba bien, extractor del baño muy ruidoso al igual que la cama que crujían los resortes al moverse, la pintura de muros y terminaciones en general de baja calidad. El nivel de las habitaciones comparadas con otros hoteles de su categoría en la ciudad (ej: Hilton) es menor

Vine por trabajo, así que llegué un domingo en la noche a Iquique, pues el lunes desde muy temprano tendría que empezar a trabajar. Había venido al Gavina otras veces, y mi experiencia había sido correcta. Increíblemente, pese a que el lunes es día laboral, había —hay, pues continúa al momento en que escribo estas líneas— una fiesta electrónica en la terraza del hotel, que se escucha fortísimo al interior de las habitaciones. Me sorprende que algo así de invasivo no haya sido advertido al momento de reservar la habitación, porque es realmente desagradable. Siempre venía al Gavina cuando tenía que venir por negocios, pero esta será la última vez. No me arriesgaré de nuevo a una pésima experiencia.