發財樹旅館(Pachira Lodge)

Hotel velho, precisando de reforma urgente. Staff educado, mas os quartos são ruins., faz muito calor em Tortuguero e o ventilador estava muito fraco. Boa área de piscina e localização. O café da manhã é bom, refeições razoáveis. O melhor é a piscina e os animais que sempre estão presentes (muitos pássaros e macacos). Se puder, escolha outro lodge. Tem melhores na região

Niveau accueil sympathique dommage pas de porteurs pour les bagages donc après 5 h de route et 1h30 de bateau parcourir les chemins pour aller au bungalow moyen. Chambre propre mais pas d’eau chaude au lavabo. Literie impeccable pas grand chose pour poser les affaires et les valises. Restauration très moyen je pensais que dans un pays pareil où les fruits sont abondants surtout les bananes et les ananas nous en aurions en dessert et bien non aucun fruit juste au petit déjeuner!!

Hotel agréable. Le cadre est verdoyant. Les chambres sont bien. Ventilateur. Pas de fenetres pour bien entendre les bruits des oiseaux et singes hurleurs le matin. La piscine est bien également. Les repas correct mais la cuisine est toujours un peu la même. Je conseille après juste pour une ou deux journée car loin de tout.

Je débute avec une précision importante sur l'endroit qu'il est important de savoir avant de s'y rendre. Le parc national de Tortuguero est une forêt pluvieuse; la pluie est donc une normalité et toutes les excursions ont lieu beau temps mauvais temps. De retour au Canada, le son des averses la nuit me manque tellement, ainsi que tous les sons de la jungle de jour comme de nuit. C'est un immersion complète en jungle. Non, les chambres n'ont pas d'air climatisé et ne sont pas luxueuse, mais quelle expérience! Et oui, quel bonheur de se réveiller au son des singes hurleurs! Nous avons vu une grande quantité d'animaux seulement à marcher dans les sentiers de l'hôtel et à flâner dans la piscine, lorsqu'on observe sans bouger, la nature se dévoile à nous et les animaux sortent de leur cachette. Contrairement à plusieurs avis, nous avons adoré la nourriture. On aurait dit qu'on mangeait chez quelqu'un du coin. J'ai plusieurs restrictions alimentaires et j'ai pu facilement manger en suivant ma diète. Nous avons fait la sortie de soir pour voir la ponte de tortues et nous avons été des plus chanceux en observant pas 1, ni 2 ni 3, mais bien 4 tortues a différents stades de la ponte. Nous nous sommes mis à genoux derrière la tortue, et on aurait pu prendre les oeufs dans nos mains durant la ponte tellement on était près. Ce spectacle inoubliable s'est produit devant nos yeux sous un ciel illuminés de millions d'étoiles. Je termine avec ce qui a enrichi notre séjour au Pachira Lodge, nos guides et chauffeurs de bateaux. Nous avons eu le privilège d'être présent durant les journées de travail de Fernando, le guide responsable de l'hôtel. Fernando, ce n'est pas qu'un guide passionné, c'est un représentant aussi, il fait son travail d'une main de maître, en plus d'être accessible, et toujours d'une politesse exemplaire. Fernando, tu as marqué notre séjour, nous nous sommes attachés à toi en peu de temps et tu nous manque!!! Nous avons également fait la connaissance de Herman, durant notre excursion dans les canaux, notre champion! Il était sensationnel pour dénicher les animaux camouflés dans la végétation luxuriante. Et oui, nous avons fait cette excursion sous une solide averse, et quel bonheur!!! Vous savez, vous avez le droit d'apporter vos bottes d'eau, c'est ce que nous avions et croyez moi ça vaut la peine de les apporter en août...saison des pluies! Mon espagnol n'étant pas parfait, je n'ai pas retenu tous les noms des autres guides avec lesquels nous avons partagé des moments, mais chose certaine, ils sont tous très amicaux, donc, n'hésitez pas à débuter des conversations avec eux, c'est tellement enrichissant.

Un hotel en mitad de dos enormes canales que forma el río Tortugero, selvático total y más, si no estas acostumbrado a estos destinos. El hotel se compone de cabañas divididas en 4 habitaciones grandes independientes + zonas comunes como la zona de bar, la piscina, el comedor y el embarcadero (único transporte con el resto de la civilización). Las cabañas tienen mosquiteras bien colocadas pero personalmente, no me gusta que no haya ventanas. Tampoco hay aire acondicionado aunque no es necesario en las habitaciones. Entiendo la ubicación, pero para la categoría y el precio, pueden cuidar mejor la limpieza en especial en baños. El primer día había pocos huéspedes y el ratito de la piscina, increíble con animales que se acercan casi a la misma. Al día siguiente llegaron muchos más huéspedes y no cabía más gente en la piscina. Como en casi todos los hoteles de Tortuguero, necesitas pensión completa (que no TI) y la comida muy repetitiva y poco elaborada vs el resto de hoteles de Costa Rica en los que estuvimos (reviews disponibles). Se formaban colas a pesar de haber muchos camareros, bastante calor en el salón comedor frente a la piscina teniendo en cuenta la humedad al 96%. Por cierto, estaban en obras ampliando instalaciones. Una mala decisión; las zonas comunes y el encanto del lugar ya estaban al límite con la capacidad actual...

Coincido con Rosa Cuairán, crea además que íbamos en el mismo viaje. Puede que sea uno de los mejores hoteles de la zona, pero el servicio no era para nada adecuado. Tenías que pedir siempre que te echaran un poco más de comida; si había jamón york para desayunar, te echaban una loncha y miraban para el siguiente. Las fotos que aparecen en la páginas que anuncian el hotel existen o eso creo, porque luego la realidad es otra. Las habitaciones son muy oscuras, con un ventilador con poca potencia en el techo; y en verdad, en Tortuguero se necesita estar más fresco, porque el calor es muy sofocante. La piscina no es termal, pero podría serlo, no creáis que uno se puede refrescar en ella.

El hotel está totalmente integrado en la naturaleza, son casitas individuales con porche y baño. No se pueden cerrar las ventanas porque no las hay, sólo hay mallas para que no entren animales. No hay aire acondicionado, en su lugar un ventilador de techo. Las instalaciones comunes son dos comedores, un bar y una piscina, son muy bonitos. Lo peor, la comida sin ninguna duda. Éramos un grupo de unas 100 personas y nos pusieron en el comedor de la parte dd abajo (el de arriba era infinitamente más bonito). La comida era pobre, las cantidades muy pequeñas, muy poca variedad, repetitiva y le faltaba calidad. Tenía que pedir todos los días que repusieran comida ya que había días que no podía ni comer el único postre que había porque se acababa. Al ver esto, protesté en recepción pero era el último día y ya poco pudieron variar. Este aspecto lo tienen que mejorar.

Viajamos 5 en familia Habitaciones lodge bastante decentes y limpias … y es verdad q el buffet no es muy variado Pero la ubicación es perfecta en medio de la selva con fauna y flora a tu alrededor bastante impresionante … saben mucho sobre tortugas. En los meses de verano es interesante hacer el tour del desove de las tortugas

Este alojamiento venía incluido en el paquete turístico que adquirimos en España. Ya estuvimos hace 25 años, incorporado igualmente en un paquete de un mayorista. Deduzco que no existe otra opción en Tortuguero. No advertimos la más mínima mejora en las habitaciones desde tan dilatado periodo de tiempo, ni en el mobiliario, ni en el baño, todo igual, pero con 25 años más. La comida que se nos sirvió fue repetitiva e insípida y el personal adolecía de la profesionalidad y amabilidad que encontramos en el resto de Costa Rica. Los camareros parecían asustados. El emplazamiento del complejo es muy bueno y te permite tomar contacto con la selva de una forma difícil de superar. Las cabañas están soportadas por pilotes que se elevan sobre el suelo y están rodeadas de vegetación y de animales del bosque. El acceso es por barco, en un recorrido fluvial increíble e inolvidable. Desde el punto de vista de los empleados solo queremos destacar la profesionalidad y amabilidad de Eli, que nos acompañó desde San José.