曼薩別墅酒店(Villa Mansa)

Nossa intenção ao ir para Mendoza era conhecer as vinícolas e essa seria a atração principal da viagem. Porém, ao chegar no hotel nos surpreendemos com o aconchego do lugar. O hotel é muito bem cuidado, jardim perfeito, piscina sensacional (aquecida), e ao fundo você tem a vista das Cordilheiras. O hotel oferece massagem (baixo valor perto do Brasil), possui um restaurante para jantares que facilita muito após um dia de vinícolas, e como Plus, possuem dois cachorros Bernese carinhosos que alegram ainda mais o lugar. Nas redondezas do hotel há uma pista para corrida/ caminhada, e você pode fazer a atividade para conhecer as paisagens da região. Sobre localização, achamos excelente, já que está no meio do caminho para as principais bodegas. Amamos e já estamos com saudades. Voltaremos mais vezes!

Uma estadia perfeita! Absolutamente nada a reclamar. Quarto confortável, cama deliciosa, funcionários sempre muito gentis, prestativos, café da manhã delicioso, jantar excelente, enfim, recomendo 100%. E ainda, de brinde, o Ulisses sempre deitado na entrada.

Tiene una buena ubicación, aunque el ingreso es un poco confuso. Se recorre una calle que parece un callejón que separa propiedades. La recepción fue buena y cálida. Estuve alojado en la habitación 12 y la vista es hermosa, si bien se ven construcciones se ven perfectamente las montañas. El servicio de desayuno es acotado con lo justo y bueno. El servicio de comida también es bueno aunque un poco demorado dependiendo de quién estaba en la atención. Un punto genial es la pileta, siempre impecable que invitaba al relax. Al realizar el check-out y siendo el cumpleaños de papá nos regalaron 2 vinos. Un gran gesto. Lo recomiendo y volvería.

El hotel lindo, hermoso jardin y pileta para relaj****. Habitación y baño amplio. Fuimos a un casamiento la habitación no cuenta con espejo como debería. El baño bastante desprovisto de detalles y sucio, había olor desagradable desde nuestro ingreso. Creo que le falta a la limpieza del hotel, hermosos paisajes para ver a traves de ventanas sucias, sobre todo del comedor. El desayuno bien, poca fruta fresca y ayer a la mañana había un bowl de frutillas envueltas en film (horrible presentación) y cuando abrí para servirme había frutillas blancas llenas de moho… desagradable.

El entorno es hermoso, se llega al lugar fácilmente, las habitaciones son excelentes, muy amplias, cómodas e impecables. Todas tienen vista a la piscina por la puerta principal de la habitación y salida a un pequeño patio por la otra puerta de la habitación que es ideal para sent**** a relaj**** y admirar el paisaje. La atención del lugar es muy buena, muy atentos y cordiales. Cuenta también con un playroom que tiene mesa de pool y mesa de ping pong . A tener en cuenta, el desayuno sin gluten es escaso, deberían ampliar y mejorar las opciones. Tiene estacionamiento propio. Me hospedé 2 veces y definitivamente volvería!

Hotel espectacular en todo aspecto. Paisajes, jardines lindos y ambiente acogedor, instalaciones excelentes, atendimento ejemplar y restaurante muy bueno, precio calidad óptimo. Cerca de bodegas importantes y cerca del centro de charcas de Coria con óptimas alternativas de bares y restaurantes

Mucho mejor que Posada Salentein. Excelente desayuno lleno de frutos secos máquina de café. Excelente atención. Todo perfecto. Hermosa piscina y jardín. Podrían poner más capsulas de café en la habitación y agua para la cafetera. El resto de 10.

Depois de uma estadia medíocre no Huentala de Mendoza, pegamos o carro e rumamos para duas diárias no Villa Mansa. E foi muuuuuuito bom. O hotel fica em uma região muito calma e silenciosa. Você pode ficar em quartos tipo em um edíficio de andares, ou ficar nas "barricas" (chalés em formato de barrica de vinho). Para recepcionar-nos, não bastou a mesinha do lado de fora do quarto com duas taças de vinho. Um casal de Montanheses Bernases cuidou de brincar muito com a gente. O quarto é enorme, com um pé-direito de uns 3 metros, aquecimento a óleo no quarto e no banheiro, ultra-eficientes, dispensando o barulhento ar condicionado (que tb estava disponível). O banheiro é bem-decorado, com perfumados sabonetes que estão à venda na recepção. As massagens são por módicos 60 reais, baratíssimo para padrões brasileiros. Não testamos o jantar (apesar do cheiro excelente), mas o café da manhã era fantástico. Reclamei dos ovos mexidos secos, e 5 minutos depois ela trazia um feit especialmente para nossa mesa. E a palha italiana deixou minha mulher louca. :) Staff ultra-amigável e informal. Eu não podia recomendar mais esse hotel a quem for a Mendoza.

Un lugar maravilloso, con un personal extraordinario, preocupados por hacernos pasar unas vacaciones increíbles, unas comidas exquisitas. Y el lugar y la habitación siempre impecables, me llevo de este viaje una hermosa experiencia