Pésima atención del personal de recepción (Gimena), destacando su mal humor , poca disponibilidad para resolver los problemas al pasajero. Durante toda la estadía tuvimos problemas con el agua de la ducha, no había agua caliente, en la habitación buen ventanal hacia la piscina pero los vidrios tienen una mugre increíble . Tema desayuno, lo sirven a las 8 de la mañana que considero que es una hora muy tardía para el que viaja y tiene que madrugar , una hora antes sería lo apropiado. Cuando ingresas al desayuno recién están organizando los alimentos , porque cambiaron el método ahora no es más buffet es continental, la chica del desayuno buena disposición . El desayuno es variado, scones tartas budines medialunas jugo yogurt café ensaladas de frutas queso y jamón, está bien. El hotel estructura y espacios comunes muy limpios luminosos y cómodo, lástima el personal de recepción que no empatiza con el cliente, dudo que vuelva
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