Hemos tenido una experiencia muy extraña en el Hotel. Siento que nos hemos quedado en El Horel Cecil de Los Angeles (ver referencia en Netflix). Llegando al hotel, 5 min antes habían robado la recepción, engañando a la pobre recepcionista que era muy maja. Al día siguiente por la tarde, estábamos haciendo una siesta y alguien se metió en el nuestra habitación y registró nuestras cosas, cuando nos dimos cuenta, había cerrado la puerta de la habitación y se llevó la llave. Al bajar a comentarlo con en recepción, otros huéspedes también nos habían comentado que se habían cruzado con un hombre que había salido de su habitación también. Fue muy raro todo y tuvimos que poner una de las butacas detrás de la puerta por si volvían a entrar. Mucha sensación de seguridad. Al día siguiente tuvimos que salir con las cosas de valor por miedo a que nos la robaran…. Pero la atención de la recepción fue maravillosa.
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